Automóvil

NUEVOS TIEMPOS

En AUTOMÓVIL no solemos hablar mucho de electrificación, pero los nuevos tiempos obligan a tener que tratar el tema. Las marcas premium y deportivas también han apostado (por obligación en la gran mayoría de los casos) por electrificar muchos de sus coches, porque hay que disminuir las emisiones y evitar las consabidas multas. La gran mayoría de marcas de superdeportivos sobre todo han empleado el sistema de hibridar con motores eléctricos y pequeñas baterías para incrementar las prestaciones que compensen el aumento de peso. El fondo de inspiración está en la F1, con los sistemas que llevan utilizando desde hace unos años los monoplazas de la categoría reina y que ha servido para que las marcas del Gran Circo fabricantes también de coches de calle dominen esa tecnología. La verdad es que cuando los conduces sientes esa explosión de potencia por la inmediatez de respuesta gracias a esa entrega de los motores eléctricos acoplados a las mecánicas de explosión y sus cajas de cambios de marcha. También esa electrificación se ha empleado (muy acertadamente) para permitir de forma más fácil y eficaz que los superdeportivos puedan tener tracción total. Un motor para cada rueda del eje delantero permite tener la tracción total cuando se necesite. Esa tecnología la hemos disfrutado en dos Lamborghini que nos han entusiasmado en este número de AUTOMÓVIL. Es cierto que se pierde cierta agilidad en circuito, porque el carácter subvirador se incrementa, pero hay que reconocer que para el día a día es mucho más seguro para el nivel de pilotaje de la gran mayoría de conductores de estos coches. Este tipo de tecnología con combinación de motores de combustión y eléctricos es el que ha utilizado Aston Martin en su espectacular Valhalla, pero eso no quiere decir que la firma de Gaydon renuncie a los sistemas clásicos. Y el mejor representante ha protagonizado nuestras páginas con el Vantage, que siendo un propulsión de la vieja escuela, con una mecánica de las de siempre, nos ha demostrado que lo clásico a veces es lo mejor. El peso se reduce y eso nos transmite mejores sensaciones cuando llevamos el coche al límite en un circuito. Los Aston no son los más eficaces en pista, pero este Vantage nos ha demostrado que algo está cambiando en el ambiente de la firma británica y que están apostando por ser más deportivos, con más sensaciones, aunque sea a pesar de perder cierto halo de clasicismo y elegancia. Y que de cara al año que viene, cuando el equipo de F1 reciba el motor de Honda, puede que sus mecánicas reciban tecnologías todavía más eficientes. Sea como fuera, en este número tenemos dos representantes de las marcas clásicas que nos han encantado con sus planteamientos más sencillos. El otro es el Maserati GT2 Stradale, que nos lleva las sensaciones de la competición a la calle. Dos marcas de siempre que se adaptan a los nuevos tiempos sin renunciar a sus orígenes. Seguir leyendo